jueves, 15 de abril de 2010

Los enigmas, ambas vías

LOS ENIGMAS (como lo escribió Jorge Luis Borges)

Yo que soy el que ahora está cantando
seré mañana el misterioso, el muerto,
el morador de un mágico y desierto
orbe sin antes ni después ni cuándo.

Así afirma la mística. Me creo
indigno del Infierno o de la Gloria,
pero nada predigo. Nuestra historia
cambia como las formas de Proteo.

¿Qué errante laberinto, qué blancura
ciega de resplandor será mi suerte,
cuando me entregue el fin de esta aventura
la curiosa experiencia de la muerte?

Quiero beber su cristalino Olvido,
ser para siempre; pero no haber sido.



LOS ENIGMAS (como yo lo siento)

Yo que soy el que ahora está cantando, seré mañana el misterioso, el muerto... El morador de un mágico y desierto orbe, sin antes, ni después, ni cuándo.

Así afirma la mística. Me creo indigno del infierno o de la gloria... pero nada predigo.

Nuestra historia cambia como las formas de Proteo.

¿Qué errante laberinto, qué blancura ciega de resplandor será mi suerte... cuando me entregue el fin de esta aventura, la curiosa experiencia de la muerte?

Quiero beber su cristalino Olvido.



Ser para siempre... pero no haber sido.