Me acaban de cambiar el humor. Mal. Mal mal mal.
Recién me llama mi jefe, me dice "¡vení, mira esto!".
Un video. Un tipo arriba de un tren. Un tren eléctrico.
El pobre tipo va y se agarra del cable del tendido eléctrico. Supongo que descalzo, haciendo de conductor eléctrico.
No puedo ver esas cosas yo. No me gustan, las rechazo. Porque las imágenes y las vivencias no se borran jamás.
No puedo entenderlo. Vos decís gente buena... humana... y ven esas cosas.
Lo mismo que esos que salen corriendo a la ruta cuando hay un accidente.
Yo lo recuerdo bien. Empezaron de a poquito. Una imagencita de acá... un videíto de allá...
Y la gente estalló, y se indignó. Un video de una persona muriendo.
Recién me llama mi jefe, me dice "¡vení, mira esto!".
Un video. Un tipo arriba de un tren. Un tren eléctrico.
El pobre tipo va y se agarra del cable del tendido eléctrico. Supongo que descalzo, haciendo de conductor eléctrico.
No puedo ver esas cosas yo. No me gustan, las rechazo. Porque las imágenes y las vivencias no se borran jamás.
No puedo entenderlo. Vos decís gente buena... humana... y ven esas cosas.
Lo mismo que esos que salen corriendo a la ruta cuando hay un accidente.
Yo lo recuerdo bien. Empezaron de a poquito. Una imagencita de acá... un videíto de allá...
Y la gente estalló, y se indignó. Un video de una persona muriendo.
“¡Que horror!”,” ¡Que barbaridad!”, “¡Estamos todos locos!”
Después, apareció otra, pero ya estaba. La primera ya había pasado, y de la segunda a la millonésima era cuestión de minutos nomás.
Hace muchísimos años había salido un video de muertes captadas por cámaras de vigilancia. Algunos pocos lo comentaban.
Pero llegaron primero las BBS, y después, Internet. Todo empezó por aquella foto del tipo muerto adentro del cocodrilo
¿Te acordás?
Si... claro... como no recordarlo... si la pusieron en todos lados.
Hoy hay cientos de páginas de videos, tipo youtube, pero todas de gente que muere.
La muerte en vivo y en directo. La muerte en casa, a diario, para toda la familia.
Si... aquella foto del cocodrilo la pusieron en todos lados. Me acuerdo. Hasta en crónica.
Después de aquellas primeras exhibiciones traumáticas, empezaron lentamente a ingresar por las ventanas. Y hoy salen en los noticieros. Todos te mandan los PPS con accidentes de autos, tipos agarrados por un tren, acuchillados, rotos, muertos.
¿Nadie piensa que tal vez, mañana, aparezcan ellos mismos en uno de esos pps? ¿Nadie tiene ya el respeto por esa gente que de por si, ya tiene la desgracia de morir una muerte horrenda?¿Es necesario sumarle la desgracia de que todo el mundo se cague de risa de su suerte?
El tipo del tren, en un evidente suicidio, evita la ayuda de dos personas, se pone de pie, y toca el cable que alimenta al tren. Hizo dos explosiones separadas por segundos. Internas ambas, con sendas llamaradas. Mucho humo. Negro.
Y cayó sin vida sobre el techo del vagón, los brazos hacia arriba, hacia la espalda.
Seguía quemándose por dentro.
Ante el estupor y la sonrisa de mi jefe.
- "Sigue largando humo el negro" – dijo entre sonrisas.
Si jefe. Tal vez se le está terminando de quemar el alma, los libros que leyó, sus recuerdos, las caricias de su madre, las lagrimas de su hijo viendo ese video… vaya a saber cuanto combustible llevaba adentro ese pobre tipo, que buscó esa salida, en lugar de creer que no hay problema tan grande como para perder la vida. Que todo se puede superar si es con determinación.
Que todo el amor o la indiferencia que pusieron en nosotros no fue en vano. Que, de última, ante todo lo perdido, aun tenemos la vida.
No sé jefe. No sé. Ese hombre cayendo sin vida se me marcó en la mente, para siempre, gracias a usted. No se que le pasó. Bueno, en realidad sí sé que le pasó. Porque, ¿Quién no estuvo subido al techo del tren con ganas de tocar el cable?¿Quién no sintió alguna vez que la única salida era esa?.
Haga lo que quiera jefe con su mente. La mía, por favor, no la toque. No me agrada en lo absoluto ver a alguien morir.
Habiendo tanta belleza, y tantos locos sueltos armando autos, sacando fotos, haciendo esculturas, tocando instrumentos, haciendo el amor, pariendo hijos, escribiendo poesía, o simplemente rascándose las bolas mientras filosofan en un bar.
Tanta belleza. Y usted... buscando muerte en la web.
Hace muchísimos años había salido un video de muertes captadas por cámaras de vigilancia. Algunos pocos lo comentaban.
Pero llegaron primero las BBS, y después, Internet. Todo empezó por aquella foto del tipo muerto adentro del cocodrilo
¿Te acordás?
Si... claro... como no recordarlo... si la pusieron en todos lados.
Hoy hay cientos de páginas de videos, tipo youtube, pero todas de gente que muere.
La muerte en vivo y en directo. La muerte en casa, a diario, para toda la familia.
Si... aquella foto del cocodrilo la pusieron en todos lados. Me acuerdo. Hasta en crónica.
Después de aquellas primeras exhibiciones traumáticas, empezaron lentamente a ingresar por las ventanas. Y hoy salen en los noticieros. Todos te mandan los PPS con accidentes de autos, tipos agarrados por un tren, acuchillados, rotos, muertos.
¿Nadie piensa que tal vez, mañana, aparezcan ellos mismos en uno de esos pps? ¿Nadie tiene ya el respeto por esa gente que de por si, ya tiene la desgracia de morir una muerte horrenda?¿Es necesario sumarle la desgracia de que todo el mundo se cague de risa de su suerte?
El tipo del tren, en un evidente suicidio, evita la ayuda de dos personas, se pone de pie, y toca el cable que alimenta al tren. Hizo dos explosiones separadas por segundos. Internas ambas, con sendas llamaradas. Mucho humo. Negro.
Y cayó sin vida sobre el techo del vagón, los brazos hacia arriba, hacia la espalda.
Seguía quemándose por dentro.
Ante el estupor y la sonrisa de mi jefe.
- "Sigue largando humo el negro" – dijo entre sonrisas.
Si jefe. Tal vez se le está terminando de quemar el alma, los libros que leyó, sus recuerdos, las caricias de su madre, las lagrimas de su hijo viendo ese video… vaya a saber cuanto combustible llevaba adentro ese pobre tipo, que buscó esa salida, en lugar de creer que no hay problema tan grande como para perder la vida. Que todo se puede superar si es con determinación.
Que todo el amor o la indiferencia que pusieron en nosotros no fue en vano. Que, de última, ante todo lo perdido, aun tenemos la vida.
No sé jefe. No sé. Ese hombre cayendo sin vida se me marcó en la mente, para siempre, gracias a usted. No se que le pasó. Bueno, en realidad sí sé que le pasó. Porque, ¿Quién no estuvo subido al techo del tren con ganas de tocar el cable?¿Quién no sintió alguna vez que la única salida era esa?.
Haga lo que quiera jefe con su mente. La mía, por favor, no la toque. No me agrada en lo absoluto ver a alguien morir.
Habiendo tanta belleza, y tantos locos sueltos armando autos, sacando fotos, haciendo esculturas, tocando instrumentos, haciendo el amor, pariendo hijos, escribiendo poesía, o simplemente rascándose las bolas mientras filosofan en un bar.
Tanta belleza. Y usted... buscando muerte en la web.
5 patadas en el orto:
Tiene mucha razón.
A mí me mandaron una vez un video con un hdp que le hacía una cosa fea a un gato que no me la voy a olvidar en la perra vida.
Antes la muerte causaba horror, como usted dice.
Ahora no.
El mundo está hecho de esto, de lo bello y lo terrible.
Pero uno puede seguir eligiendo de qué lado pone el pie :)
Besos
vas a pensar que estoy chapita, puede ser....pero me resisto hasta a ver películas violentas. Ya sé, me vas a decir que en cualquier peli matan a un tipo...pero selecciono, nunca veo peliculas de guerra o aquellas que implíctamente sé que van a mostrar muerte y volencia . Lo de tu jefe ya no extraña a nadie, el morbo de la gente ha tomado dimensiones increíbles
Parece ser que vivimos en el reino del morbo.
De terror.
CLAP! CLAP! CLAP!
"El odio al otro es nuestra suerte,
la sangre ajena es nuestra viña.
Cuando profanen y den muerte
seremos aves de rapiña.
Y una vez más, como tragedia,
ronda el olor a carne rota
de calabozo, de Edad Media
Y una vez más, contra el impulso
de besar y abrazar a gentes,
ceder al último recurso
de ojo por ojo y diente a diente"
Publicar un comentario